Descripción de las Partes de un Hammam o Baño Árabe
La primera de estás salas es una sala seca donde poder desvestirse antes de comenzar el baño y vestirse una vez finalizado el mismo.
La segunda sala servía para aclimatar el cuerpo a las posteriores estancias, en ella había una pequeña pila para las abluciones.
La tercera sala es la estancia principal de mayor tamaño y es lugar que servía para el masaje y la limpieza del cuerpo.
En la última y cuarta sala se encuentra la zona más caliente y la pila para la inmersión.
Funcionamiento de Un Baño Árabe o Hammam
El hammam se calentaba a través del suelo con un horno o caldera.
El suelo de mármol era calentado por tuberías subterráneas, de modo que al arrojar agua en el suelo está se evaporaba produciendo vapor.
En la actualidad este tipo de estancias se conoce como baño turco.
El techo estaba cubierto de bóvedas con lucernas que dejaban pasar la luz y el aire, de manera que se podía controlar la temperatura interior abriendo y cerrando las mismas.
La última sala es la más caliente de todo el hammam o baño árabe, en ella se encuentra la pila para la inmersión, que era calentada a través de un horno colocado en la parte inferior y que proporcionaba calor al suelo.
Además, disponían de calderas en las paredes laterales para calentar el agua.
Es probable que en estas salas se alcanzarán los cincuenta grados centígrados.
Las altas temperaturas y el vapor favorecerían la limpieza de la piel y la eliminación de células muertas que eran eliminadas con esponjas hechas de crines (pelo de caballo u otros animales), una vez limpia la piel entrarían en la pila de inmersión.
Al finalizar el baño, regresarían nuevamente a la sala inicial o de reposo.